La Rufete con la que se elabora este tinto salmantino procede de viñedos muy viejos dispersos por las localidades de San Esteban de la Sierra, Garcibuey y Molinillo. Todo el proceso busca la mayor naturalidad posible, con intervenciones mínimas y técnicas amables con el medioambiente, sin uso de herbicida. Viñas libres de productos dañinos. Un tinto a tener muy en cuenta para adentrarnos en las maravillas de Malahierba.