Miguel de Cervantes, ya plasmó en su inmortal obra "El Quijote", a Sancho pidiendo el “caro” vino de esas incomparables cepas autóctonas, refiriéndose al pueblo de San Clemente, donde nace la cooperativa Nuestra Señora de Rus. Actualmente, con una experiencia de más de 75 años haciendo vino, bodegas Puente de Rus respeta aquellos aspectos del proceso de elaboración que hacen del vino un producto artesano, pero al mismo tiempo aplica los conocimientos que aporta la ciencia y la tecnología actuales.
Este verdejo es de color alimonado con reflejos dorados, en fase olfativa resulta fresco y aromático, con recuerdos de hinojo, hierba recién cortada y dejes de fruta madura. En boca es suave, untuoso y con cierta fructuosidad.
Ideal para mariscos, pescados y quesos.